Uso de excelencia para superar inseguridades
Siempre que no sé cómo actuar en determinadas situaciones, podríamos decir críticas, cierro los ojos e imagino qué consejos me daría el chino que eternamente está a mi lado y es mi guía. En estos momentos de cuarentena y de crisis mundial, lo primero que me diría:
– tranquilizar la respiración, aquietar los latidos de la pulsación, bajar los decibeles de la vibración interna porque no hay nada para hacer afuera, nada nos espera afuera.
– conservar la templanza, estar activo sin acelerar, sin calentarse internamente, sin excitar la mente o los instintos que despiertan los deseos.
– agarrar una buena escoba y lentamente barrer toda la casa, pasar un paño húmedo y buscar tareas caseras que pidan dedicación y tiempo: preparar conservar con las frutas y/o verduras de estación.
– practicar meditación o cualquier otra forma de limpiar los pensamientos intensos que se transforman en tóxicos, acelerados que atienden a nuestra profesión o emoción hacia novio, pareja, inseguridad o miedos;
– buscar estar en contacto con nuestra esencia, llegando a la inteligencia interior que “nos habla y nos acompaña todos los instantes de nuestra vida” y que perdemos la oportunidad de escucharla porque fabricamos pensamientos innecesarios que nos traen miedos e inseguridades.
El chino me diría: “No es momento de tener miedo, no hay nada a temer porque desconocemos la situación actual, no sabemos lo que pasará…”. Recomendaría estar lleno de energía interior, alegría y predisposición para la nueva vida que siempre está presente después de la crisis.